- El payador marino se
transformó, por instantes en porteño y se copó con el
lunfardo. Pero, por suerte, enseguida se le pasó... Y
volvió a los boliches camperos…
-
LA PAYADA DE LA SEMANA
-
- El payador se vistió
- de porteño esta semana
- y su sextilla se ufana
- tendrá su toque
lunfardo...
- Es sí lo ayuda el Eduardo,
- por que sí no, irá en
cana...
-
- La verdad que estoy
cabrero,
- me carbura la azotea...
- es que alguien me tuitea,
- pero me huele a cachada...
- Más agarro la encordada
- y me banco lo que sea...
-
- Sí me quiere embagayar
- le joderé el estofado...
- Nunca anduve abombado,
- pa que me emboque una
dona...
- A mí nadie me abotona...
- salvo que lo haya
aprobado....
-
- Soy veloz y ligador
- y en el chamuyo la
gasto...
- Siempre tengo el as de
basto,
- el de espada es para giles...
- Solo cortan perejiles,
- yo con eso, no me
empasto...
-
- Cuando estreno cambambuses
- nunca me meto en el
fango...
- Soy el mejor en el tango,
- Y también en la milonga...
- Siempre ando meta y ponga,
- si hace falta, me
arremango...
-
- Siempre gana la carpusa
- en las cosas del amor...
- No alcanza con ser dotor
- si lo que falta es
muñeca...
- Tampoco ganás con teca,
- aunque es mucho a tu
favor...
-
- Y si vos sos cachirulo
- no te caigas a la Villa,
- no tendrás ninguna silla,
- acá solo gana el vivo.
- Mejor tomate el olivo,
- es la historia muy
sencilla.
-
- Y nena, sí sos lorenzo
- y venís deshilachada,
- no serás desperdiciada,
- porque en medio del
quilombo,
- pueden llenarte el bombo
- en la playa y de parada.
-
- Ya se que estuvo malerba
- esta payada porteña,
- pero no quedé se seña,
- ni quedé como un
bichoco...
- Ya lo se, parezco loco
- ¡Y sí con Freud tengo
peña!
-
- Terminada la experiencia
- del lunfardo, tan compleja
- vuelvo a la “moda vieja”
- de payada semanal...
- Una de arena y de cal,
- un riñoncito y molleja.
-
- El payador reivindicó
su pertenencia a los boliches de paisanos pendencieros,
luego de su paso por una milonga. Y le canta al amor, como
no podía ser de otra manera. O sí, pero no.
-
- Soy payador de boliches
- donde es preciso de guapo
- naides me pasa el trapo
- y menos los cocoliches.
- Adoradores de afiches
- y de pasados sangrientos
- Cerebros calenturientos
- y con neuronas quemadas,
- solo hacen payasadas
- de puro acostumbramiento.
-
- La décima es mi pasión,
- me fascinan sus octetos.
- Ni romances ni sonetos
- me brindan tanta emoción.
- Me brota la inspiración
- con fuerza que me
trasnocha.
- Mi PC versos derrocha
- en busca de buena rima
- Pues la mala, me lastima
- y la bonita, me abrocha.
-
- Decimista, decimero,
- versador, bardo, poeta,
- el título no es mi meta
- ni ser literato quiero.
- Soy de las letras obrero,
- de las rimas centinela.
- Soy alumno de una escuela
- literaria que perdura
- en la clásica estructura
- de la décima espinela.
-
- La palabra es la expresión
- del pensamiento del hombre
- es la que le pone nombre
- a todo en la creación.
- Es pues, comunicación
- del abstracto pensamiento.
- Es verdad y en un momento
- también puede ser mentira,
- como cuando se retira
- de un solemne juramento.
-
- La palabra no es sustento
- si en el viento es
expresada,
- no te garantiza nada
- pues se marcha con el
viento.
- No actúes como jumento
- si un trato estás
concretando.
- Para no acabar llorando
- no tomes mi verso en vano:
- mas vale papel en mano
- que cien palabras volando
-
- La palabra se respeta.
- La palabra se confirma.
- Sin el poder de la firma
- la palabra no es completa.
- por eso es así mí meta
- lo escribo y me hago cargo
- no lo hago por encargo
- ni succionando huevitos...
- Ni tampoco, “saquecitos”
- dejarán sabor amargo.
-
- He visto a muchos caer
- de los cuernos de la luna
- por creer que la fortuna
- es eterna sin saber
- que la calidad de ser
- famoso no es garantía
- de que la fortuna un día
- se termine con tu
suerte...
- Y todos a verte inerte
- te dejarán en la vía.
-
- Más la mugre me cansó
- y casi casi vomito...
- es por eso que ya omito
- lo que la mierda creó...
- Cierro los ojos, y yo
- con una música bella
- imagino a esa estrella
- que miraba en la playa.
- Solo me quedó la toalla
- y el aroma de ella.
-
- Jugando con el recuerdo
- a pesar de la distancia
- hoy yo siento la
fragancia
- de tu cuerpo sudoroso
- que recorría, amoroso
- lentamente con mis labios
- que transformados en
sabios
- solo te daban placer...
- Aún te añoro, mujer
- en mí cama, hay resabios.
-
- Una musa no se olvida
- a pesar de la distancia
- su sonrisa, su fragancia
- no parten con su partida.
- Fuiste parte de mí vida
- ahora sos de mi
recuerdo...
- Más como quiero ser cuerdo
- He de volver al presente
- En la que muy diligente
- otros labios ahora
muerdo...
-
- Pues ella me cautivó
- tan solo en un instante
- Su presencia avasallante
- enseguida me impactó.
- Un beso me regaló
- una noche, de repente...
- Me dijo: Soy imprudente
- pero hago lo que siento...
- Y yo nunca me arrepiento
- pues no soy ambivalente.
-
- Ya conozco su sabor
- y ahora quiero conocer
- el misterio de su ser,
- lo profundo de tu amor.
- Quiero ahogarme en su
sudor
- quiero hacerle descubrir
- el deleite de sentir
- transformarse la ilusión
- en torrentes de pasión
- que le faltan por vivir.
-
- Y te escribo a vos bebota
- las décimas que se vienen
- notarás que todas tienen
- una esperanza grandota.
- La pasión en ellas brota
- y también tienen ternura
- y con mucha calentura
- vuelan al cielo,
triunfantes
- Octosílabos brillantes
- buscan nido en tu
abertura.
-
- No te quiero lastimar,
- no te vayas a ofender
- por mis ganas de querer
- tus secretos develar.
- Quiero invitarte a probar
- las delicias del placer.
- Quiero tenerte mujer
- entre mis brazos y así
- fundir mi pasión en ti
- y de amor desfallecer
-
- Tener tu cuerpo a mi lado.
- Poderlo tocar y ver.
- A tu piel reconocer
- hasta con ojos cerrados.
- A tu calor abrazado
- usar tu pecho de almohada
- pedirte de madrugada
- un beso para dormir,
- para soñar y sentir
- que sin tu boca no hay
nada.