Todo cabe en un orgasmo y en 140 caracteres sabiéndolo acomodar

CUENTITOS PARA EL TWITTER

Fácilmente

Supe que estabas allí. Aún en la oscuridad seguí el camino correcto y te hice mía, dulce niña. ¡Benditas sean las feromonas!

Amor a primera vista

El ciego, con las yemas de sus dedos temblorosos pudo ver cada centímetro de ese rostro que se imponía hermoso ante él.

Tarde

Me pedías el alma y yo sólo te ofrecí mi cuerpo. Ahora, en tu ansia de entrega, me das el placer de tu cuerpo y el dolor de un alma desolada

Decidido

Finalmente decidí terminar aún con el único recuerdo tuyo que me quedaba y tiré tu fotografía. Aún sigo esperando que llegue al suelo.

Mirada

Yo contra los huevos fritos no tengo nada.
Son ellos los que me miran sorprendidos, llenos de terror.

Vuelos

Esas no son golondrinas que vuelven desde lugares perdidos: son mis besos, que al no encontrar tu boca, negrean el cielo buscando su nido.

Finalmente

Cuando escribió fin, se dio cuenta de que su personaje aún respiraba; pero ya era tarde para ayudarlo, así que apagó la PC y lo dejó morir.

Creación

Y un universo se creó en su interior. Las palabras se condensaron como galaxias narrativas que giraban atraídas por la fuerza de una Idea.

Florecer

A punto de terminar su relato, el viento se llevó las palabras. Cayeron en tierra fértil y, en primavera, brotaron cuentos de colores.

Conjugación

La maté, me mató, nos matamos. Luego aprendimos a conjugar correctamente los verbos, pero ya era demasiado tarde.

Entrega

Hubo una vez un cíclope que le echó el ojo a la buena literatura, desde entonces sólo puede leer en braille.

Final

Despertó en el cine asombrado. ¡Eso era la muerte! La añoranza le nubló el sudario blanco que tenía enfrente como muro imposible de salvar.

Adentro

Nunca vería monstruos, dementes o asesinos en la pantalla. Los llevaba en su interior

Costumbre

Su soledad era tan grande que hasta la mejor compañía la hacía sufrir.

Viaje

Regresamos del viaje astral con la ropa mojada. Arriba dejamos el río azul y los peces de colores con alas.

Jardinero

Se cansó de sembrar flores. Ahora cultiva, con esmero, las cabezas de Margarita, Azucena, Rosa, Violeta...

Infiel

Le fui infiel con la muerte y ella se fue con otro.

CORTITOS Y AL PIE

Los de siempre pero otros

Compañías

Me gusta estar con mis otros yo, si estoy triste viene mi yo chistoso y me cuenta un cuento, si tengo ganas de bailar viene mi yo festivo y baila conmigo, cuando las cosas no salen como yo quisiera vienen mis yo de la esperanza, la fe y paciencia, y cuando la guerra, el hambre, la injusticia, impotencia e ira se apoderan de mí viene mi yo de la paz espiritual para calmarme. ¡Por eso me gusta estar conmigo!

Original

Abrió aquel viejísimo libro y empujado por una fuerza extraña, leyó en voz alta un verso incomprensible. Apenas pronunció la última sílaba, se desintegró. Cuando su mujer entró a la biblioteca, sólo encontró sobre la alfombra el libro abierto en la fatal página. Cuidadosamente lo levantó y regresó a su estante. A las pocas semanas se casó por quinta vez.

¡Puta madre!

-¿Qué es la soledad?- Piensas mientras te sientas completamente desnudo en el piso.
Ningún mueble te acompaña en el cuarto vacío, no hay ventanas ni puertas, nada.
Con tus uñas rascas la madera que soporta tu peso, para luego lamer las heridas que te infringes con las astillas que de vez en cuando saltan del parquet.
Después de mucho tiempo intentas hablar, únicamente para escuchar tu voz, pero los gruñidos toscos y rasposos te corroboran que has olvidado como hacerlo.
Ahora estás tendido allí, y en tu mente tratas de imaginar el cuerpo que la oscuridad total te impide ver y te das cuenta que no puedes. No recuerdas tu cara, tus extremidades, tu sexo, no te conoces.
-¿Qué es la soledad?- Piensas, sumergido en el negro más absoluto, mientras que esos ojos desconocidos para ti, mojan tus pies con lágrimas de desesperación.

Vicioso

Decían que eso no era bueno, pero nunca hizo caso de los consejos y, buscando siempre la soledad, se entregaba intensamente a su práctica.
Oyó que incluso uno se podía volver loco, sin embargo prefería esa demencia privada que llenaba su ser de vibraciones intensas, gratificantes.
Un psiquiatra le aconsejó mesura, temiendo por su equilibrio; así y todo, se guarecía del mundo y nunca cesaba en su placer a escondidas.
Y al llegar la noche, cómplice de secretos, se deslizaría entre las sábanas blancas, aún frescas, y en el secreto de la oscuridad, era tal y tan prolongada la dedicación que, cuando su cuerpo era presa del sueño, dormía con una sonrisa de placer esbozada en su cara feliz. Aún se reflejaban en sus labios las ideas imposibles, los paraísos inventados, las ensoñaciones, y es que..., no lo podía evitar; era su vicio: imaginar.

Reflejos
Sabes que soy un lobo con buen olfato. Eso es lo malo.
Huelen a sonrisa no vista, a ojos de despertar no saboreados, a voz sin boca ni labios. Esos que quiero abrir para colarme dentro y ser vos.
Los que no están en el espejo que me devuelve un reflejo pálido. Vacío.

Happy Birthday

Sintió una desagradable presencia tras de sí, un aliento recio en el cogote, un tintineo de medallas.
El Dictador, en tono despectivo: “¿Cuántos años tenés, viejo?”.
El anciano, sin mirarlo, continuó escuchando la radio: “Ciento once. El sábado que viene, porque vendrá, ciento doce”.
El Dictador, con una ligera sonrisa: “Eres osado al pensar así en mi país”. Ahora, en serio: “Basta de cháchara, quiero que me reveles el secreto de tu longevidad, ¡es una orden!”.
El anciano, respondió sin desviar la mirada: “ No cumplo órdenes, cumplo años”.